diumenge, 7 d’octubre del 2007

una semana más tarde

Segunda jornada de liga. Contra Leganés, me doy cuenta de que es factible, que se puede ganar. Las americanas dicen de ir a verme, y yo.... "pofale, pofueno. po cojonúo". Después de comer en la Blume, me paso a ver los de segunda división a ver quien hay. Como esperaba, muchas caras conocidas. Me pongo a hablar con Albert y le cuento mi vida. De golpe me pregunta si juego mañana y me doy cuenta de que se me va haciendo tarde, así que me voy a saludar a los Montoya y alguna más gente con la que tenía pocas ganas de hablar. Cuando llego a "casa" (suena muy raro llamar casa a mi residencia) aún tengo tiempo de recoger la ropa tendida y doblarla un poquitillo. Les digo a las americanas como llegar al pabellón, cosa que yo no estoy demasiado convencido de cómo puedo llegar a hacer. Pero después de preparar las cosas me pongo en camino, y me paso de estación. No hay problema porque doy la vuelta y en cinco minutos vuelvo a estar donde quería. Coger la línea azul hasta Atocha Renfe, eso era fácil. Así que podía leer tranquilamente a Herman Hesse y sus sabios cuentos. Una vez en Renfe, miro de comprar un ticket, pero justo me doy cuenta de que tengo un bono y miro a ver si me lo acepta. Acerté, ya podía pasar. Buscar la vía me fue muy fácil, solo que me fuí al lado equivocado. Lo supe muy rápido ya que llegó un hombre preguntándome si en esa vía se iba a "Zarzaquemada", la estación a la que iba yo, y al decirle yo que creía que sí, un hombre nos contestó que íbamos en la dirección equivocada. Cosas de "madrileños". Una vez llegué a Zarzaquemada divisé enseguida el "dia", y llevaba tiempo de sobra. Me sorprendió verme leyendo y caminando por un sitio completamente desconocido. Me había equivocado de dirección, me dí cuenta al momento, seguí la dirección equivocada que se supone, me tenía que marcar el "Dia". Al llegar al pabellón envío un mensaje a Ernesto: -Ya estoy en el pabellón, no hay que preocuparse. - Cinco minutos después me llaman, que si ya he llegado. - Pues claro, acabo de enviar un mensaje, estoy aquí con los de Leganés. - dije - Vale, pues que se pongan, que nos hemos perdido- obtuve por respuesta.

Cuando llegó mi equipo, caras felices, al menos la mía. Entramos en el pabellón y mis miedos respecto a la liga de cuando acabó la temporada pasada toman forma real: no juego. Tampoco me parece mal, yo soy consciente de lo que se juega el equipo y me parece una suerte tremenda tener a alguien como Ernesto en forma. Las cosas no empiezan bien, perdemos el mixto y además de una forma tristona. Nos recuperamos en los dobles, Ernesto y Javi están muy compactos y las niñas, aunque tampoco lo tenían muy difícil, como Álex y su cruz roja habían previsto, ganan. 1-2.
Le toca el turno a Carol y a Ernesto. Estaba claro que no era el día de Carol y el Corrales se lo ponía jodido a Ernesto, con lo que en ese momento sufrimos mucho. Ernesto controló los finales de sus dos sets, y mirando lo que hacía Carol (increíble a la vez que vergonzoso y genial) que no pudo con la que supongo es hermana del rival de Ernesto. La próxima vez espero que sea diferente. Con un 2-3 estábamos un poco asustados, y le tocó empezar a jugar a Paula, a la que ví muy bien enfrente a su rival desde el primer momento. Yo ya imaginé que al nivel que estaba jugando daría alegrías, pero me había quedado corto. Gana muy fácilmente, teníamos la eliminatoria ganada. Tocaba ver a Javi como se las arreglaba contra un apañero bastante majo de la blume. Un partido de gran calidad, una pena que Javi no ganase. Enfin, tampoco se le vió muy dolido, y tampoco tenía porqué. El hecho de no jugarse la eliminatoria era un alivio muy grande, supongo que si hubiese sido así Javi hubiese podido dar aún un poquito más.

Enfin, que se me hizo muy raro acabar la eliminatoria sin jugar ni un partido, para eso me hacian ir hasta allí XD.
Luego cena con los de arco, muy majos ellos. El Foster no me gusta, y más ahora con el peazo dolor de barriga que tengo y con la especie de agujero en el bolsillo que tengo que hará que me piense el levantarme a desayunar en casa. Haré caso a mi padre y aprovecharé para comer bien en la Blume -"sabes lo que es comer bien, no?"- Sí, papá. Gracias.

Media hora en escribir esto y tampoco me parece tan largo. Escribir un libro ya debe ser la polla. Enfin, ahora ya puedo mirar mis billetes para Granada, que decía que no estaba operativo hasta las 2:30 por motivos de reparación, como la web del club. O algo así.